A los músicos en su día: SALUD!

El músico paraguayo es una especie de apostol de su trabajo, talentoso, sacrificado, pero lamentablemente mal pagado y no reconocido como debiera ser.

La música es una expresión innata del ser humano, nos acompaña en diversas situaciones emocionales, desde la tristeza y la depresión, hasta la euforia y alegría, pasando por la ira, enojo, y como no, el enamoramiento o decepciones. Hay música para todos los estados anímicos de las personas.

Entonces, siendo que no es algo fácil de lograr ejecutar con maestría un instrumento musical, afinar notas cantando, interpretar un tema son cosa harto difíciles sin el tiempo que se les debe dedicar, la práctica es fundamental para el progreso de estudiantes de música, siendo que NO ES NADA FÁCIL componer temas que luego «peguen» y se queden en la memoria del público, que coreen tus canciones y luego sean fans tuyos o de tu grupo, entonces POR QUE NO VALORAMOS COMO DEBE SER A NUESTROS MÚSICOS?

VALORAR a nuestros músicos implica un cambio de actitud desde nuestro papel de público asistente a conciertos y consumidores de su arte, implica dejar la actitud del «voy a esperar que fulano me haga entrar gratis», del «vamos a atropellar la entrada» o del «vamos a entrar nomás por la muralla».

Significa no hacerlos tocar gratis cuando se estén cobrando entradas, o el famoso «es para promocionarte, después la próxima cobrás», a ver si un médico te atiende cuando estás enfermo para «promocionarse» o si un abogado te salva de la cárcel por el mismo motivo, SER MÚSICO debe ser una profesión respetada como tal y dejar de ser vista como un vagoneta que no hace nada, también es necesario para eso que los PROPIOS MÚSICOS entiendan esto y tomen en serio lo que hacen, siendo responsables en sus horarios y presentaciones y dando espectáculos dignos de la audiencia que los requiere.

QUEREMOS MÚSICOS que vivan de la MÚSICA, que no tengan que estar siendo oficinistas, funcionarios públicos u otras ocupaciones siendo que con el talento que tienen deberían estar ensayando y componiendo, es una UTOPÍA, pero varios músicos aquí lo lograron por lo que no es imposible. APOYEMOS ESTO siendo coherentes, pagando nuestras entradas, comprando los materiales y merchandising que con tanto esfuerzo ponen a la venta, demostrando que nuestro «fanatismo» es para bien, sea desde el under o desde el «mainstream» criollo, todos los músicos merecen algo: RESPETO.

AL MÚSICO/A PARAGUAYO/A EN SU DÍA! SALUD!

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